martes, 13 de diciembre de 2011

A mi me gusta cuando tú eres gris y el cielo llora.
Cuando sales a respirar y el mundo te devuelve belleza en cada árbol, cada calle, cada persona. Cuando te envuelve y te cuida y te deja sin aliento y lo quieres recordar todo.
Se me llena el vacío del pecho cuando veo a mi padre reír.
Soy feliz cuando aprecio la belleza, y es difícil no apreciarla donde estoy. Lo veo en cada cosa, en cada rayo de sol perpendicular. Quiero que esta esquina se conserve siempre así, con este encanto, y siempre pueda correr aquí a embargarme de ilusión.
Me gusta la satisfacción con uno mismo. Creo que hay pocas cosas mejores que ese sentimiento. -Aunque o precisamente porque es muy fugaz-
Cuando te levantas una mañana llena de esperanza por la humanidad, después de haber sido tan apática, tan incrédula.
Quizá eso vuelva mañana, pero hoy me he contenido y hay esperanza en cada pedazo de mi.
Quizá eso vuelva mañana, pero sabes que hay más Vida, más Luz. Sabes que no todo es siempre así.
Cada vez hay más y más claridad aquí. Incluso cuando soy gris sé que se cuela por las rendijas y no me voy a rendir, aunque esté a veces tumbada en el suelo.
Todo está lleno de belleza. Esta es mi verdad absoluta.
Vosotros estáis podridos, y a veces me confundís. Pero yo no. Yo nunca fui así. No sabes como puedo llegar a brillar, no tienes ni idea. No me cortéis más las alas, que yo vuelo y aunque lo haga regular voy a seguir saltando.
Que en fin, tengo música, zumo de naranja, aire en los pulmones, libros.
Si viajo contigo y tú me embelesas solamente con palabras. Palabras, mágicas y mortíferas. Eso es todo lo que quiero.
Que no necesito nada. Me alimenté de sonrisas. Viví de brazos. Muero por romper las etiquetas, aunque eso es muy difícil.
Las personas sois mi amor. Ni contigo ni sin ti. Os detesto. Me queréis arrastrar y a veces soy débil. Os odio de verdad. Os mataría.
Pero si aún soñáis, os perdono todo.
Háblame de Peter Pan. Yo creo en ti.

No hay comentarios:

Publicar un comentario