viernes, 1 de julio de 2011

nofuncionanlosacentos-

Por mi cumpleaños no sé que hacer, si una gran fiesta o absolutamente nada. Podría ignorar que me hago mayor o pasarlo bien. Aunque todo depende de lo que vayas a regalarme...
El mejor regalo, sin duda sería que me parases el tiempo, es que entiendeme, voy a cumplir muchos años, Peter Pan ya no me querrá en Nunca Jamás.
O podrías regalarme un te quiero, sólo tú y sólo hoy. También me vale que me digas lo que estás pensando.
puedes regalarme un frasquito con tu olor, para que cuando te vayas no te eche tanto de menos, o para que te eche de menos en condiciones, no sé.
Aunque ya sabes lo egoísta que soy, así que quiero algo que me sea útil para hacer mi vida mejor, ¿qué tal fuerza? eso siempre es un buen regalo, siempre es necesaria, así que ya sabes, con eso no fallarás.
Nononono! ya sé, regalame una tarta gigantesca, con sonrisas de lunes a sustituto de azúcar, con glaseado de burbujas de colores e ilusión. Que la masa esté echa de seguridad y así no me sentiré tan mediocre nunca más, claro que si le añades talento quizá sea más sencillo. Que el primer piso en vez de chocolate sea independencia, y el segundo esté cocinado a base de dependencia...y no te olvides de añadirle casualidades y contradicciones, que sin un poco de kaos mi tarta no será lo mismo.
Regalame lluvia y cielos grises. O haz que con tu superpoder me gusten los cielos azules. Sí, eso estaría mejor.
Embotellame mil abrazos, para que cuando esté triste sólo tenga que girar el tapón.
No sé, no sé...algo que hayas escrito tú, rosas,un reloj de bolsillo, piruletas, no, mejor, un album de recuerdos. Olvidalo.
Regalame promesas que nunca se rompan. creo que eso no es posible. Así que mejor regalame palabras bonitas que no formen promesas.
Con tus superpoderes puedes hacer que mi memoria no sea tan horriblemente selectiva, también ese sería un buen regalo.
-Regalame viajes a otra galaxia, el viento de cara,estanterías llenas de sueños, un amanecer, olor a suavizante en jerseys gigantes, grandes ciudades, unos pies sobre los que subirme para bailar a oscuras en mi habitación, curiosidad, eterna navidad; regalame una habitación con todas las cosas bonitas que tiene la vida para que cuando lo olvide sólo tenga que ir allí. -
Dame de la garantía que me asegure que siempre podré soñar, pase lo que pase.
No, ya está, tengo el regalo perfecto. Quiero que me regales valor.
Es lo que más falta me hace.