martes, 7 de abril de 2015

Those who do not weep, do not see


Están en una habitación una bióloga, una arquitecta, una traductora e intérprete de japonés y 2 licenciadas en Comunicación Audiovisual.
Podría ser el principio de un chiste, pero todas son de la misma nacionalidad, así que supongo que no lo es.
Debe ser que en esta habitación se está discutiendo algo importante, para que sectores tan diferentes se vean involucrados. Las naciones unidas, una reforma política, algo que nos afecte a todos o que queramos crear juntos.
Quizás están creando un nuevo partido político. No sería mala idea.
O podría ser una gran campaña mediática sobre un increíble laboratorio que dirige la bióloga, diseñado por la arquitecta, y que abrirá sus puertas en Japón, gracias a las labores de la traductora de japonés...
Pero algo importante pasa aquí, porque los asistentes se sonríen ilusionados desde el otro lado de la mesa ante la perspectiva del futuro. Se miran a los ojos, se dan ánimo, se dicen sin palabras que por fin la situación va a mejorar, que para eso están aquí. Por eso, todos vienen dispuestos a dar lo mejor de sí mismos, a aprender tanto en lo profesional como en lo personal, con todas sus esperanzas puestas en este proyecto. Hablan por turnos, escuchando con atención lo que otro puede aportar.
También podríamos estar asistiendo al nacimiento de una gran campaña feminista, porque hay 6 mujeres en la habitación y todas son jóvenes, ambiciosas, fuertes, profesionales, con las ideas claras.
A las 5 anteriores ya las conocéis.
La sexta es quien dirige de qué se habla dentro de la sala. Por quien hay una tensión educada en el ambiente y aunque el nerviosismo no se deja ver se delata en pequeños gestos: tocarse el pelo, mover ligeramente una pierna, re-colocarse en la silla una y otra vez, toquetearse las pulseras.
Debido a la presencia de La Sexta Mujer, como es normal, también hay en el aire una competitividad educada.
Porque esto es una entrevista de trabajo, y estas cinco mujeres excepcionales, cada una a su manera, quieren el puesto.
Ese puesto de trabajo que no tiene nada que ver con la biología, la arquitectura, la traducción o los medios de masas. Ninguna de estas mujeres ha sido preparada profesionalmente para este puesto, pero aquí están, intentando convencer a La Sexta Mujer de que son la candidata ideal, deseando ser ella quien gane, para pagar sus facturas, para no vivir sin hacer nada, para sentirse al menos un poquito útil.

Están en una habitación una bióloga, una arquitecta, una traductora e intérprete de japonés, y 2 licenciadas en Comunicación Audiovisual.

Podría ser un chiste, aunque no le encuentro la gracia.
Lo que es seguro es que se están riendo de nosotros.


♪ Do you hear the people sing? ♪